Hay una mujer en el corporativo con la que a veces trato. Se llama Wendy.
Aún no la conozco físicamente, he hablado con ella por teléfono, nos hemos escrito algunos mails y desde ahí parece agradable.
Pero cada vez que le hablo o escribo no puedo dejar de pensar en: «Welcome to The Tropical Island Of Jamaica, Have a Nice Day» y me cago de la risa.