Llegue a Guilin por la noche y me llevaron derechito al Hotel.
Al otro dia decidi que el desayuno seria «Zona de seguridad» de comida de aqui en adelante, asi que solo comere cosas mas o menos normales (frutita, pan,y cosas de aspecto familiar) para evitar tragedias.
Muy temprano pasaron por mi, el itinerario consideraba pasar la mañana a bordo de un crucero por el rio Li, que es orgullo chino por sus paisajes. El guia de nombre «Huan», para los chinos, «Looney» para los occidentales y «Juan» para mi, resulto ser de lo mas agradable. Un muchacho bastante joven, maestro de profesion y que es guia mientras le resuelven si lo aceptan para estudiar una maestria en Canada. Leido y escribido el muchacho, y ademas muy curioso de Mexico, preguntaba mucho como eran las cosas en mi pais.
En el crucero, la mayoria de los turistas eran internacionales y muy pocos chinos. Habia de todo, gringos, alemanes, rusos, portugueses y su seguro servidor. En rangos de edades que variaban desde los retirados que se dedican su 3a edad a viajar hasta las adolescentes jetonas que no le encuentran gusto a nada y que viajan con sus papas por obligacion.
El crucero estuvo sabrosisimo, el rio serpentea entre montañas y bosques y unos paisajes hermosos. El clima bastante tropical (como a mi me gusta) hacia sentir la brisa muy refrescante. Ademas el rio estaba muy tranquilo y se podia escuchar el sonido relajante del agua contra las piedras de rio, asi como sonidos de la fauna local. Muy agradable.
Los chinos en su infinita contemplacion y ociosidad le pusieron nombres a cada montaña a la que le le veian forma. Entonces, al dar una vuelta uno pasaba de la montaña manzana, a la mama cargando a su hijo, o el lienzo de los 9 caballos. Total uno se pasa la mayor parte de las 4hrs que dura el viaje tratando de encontrarle forma a las piedras. Buen truco de los chinos para mantener al turista entretenido. Otro Highlight turistico del crucero es la curva de donde se tomo la imagen para el billete de 20 Yuanes. Yo por mas que buscaba una montaña con la cara de Mao tipo monte Rushmore no la encontraba, hasta que me dieron el tip que era el paisaje del otro lado del billete. (No me es facil poner imagenes ahora, asi que vayan y gogleen «20 Yuan Bill» para que sepan de lo que les hablo).
A bordo del barquito nos dieron de almorzar, la comida a pesar de ser china era «Safe for Tourists», nada vivo, ni nada muy condimentado. Como novedad al final de la comida una mesera ofrecia por 20 Yuanes una copita de vino de serpiente. Que segun decia, era bueno para la salud.
El crucero llega a su final en el condado Yangshuo. Hace 20 años Yangshuo era un pueblito bicicletero. Hoy, sigue siendo un pueblito bicicletero pero con muchos mas turistas y atractivos para visitar. Lo mas popular en Yangshuo es la calle occidental (Western Street), que es famosa por que esta llena de turistas (Meta-turismo!). En Western street los turistas occidentales se la pasan comprando chucherias o bien en alguno de los bares locales, mientras que los turistas domesticos, en su fetiche, van a ver a los turistas internacionales. Suena complicado, pero funciona y la calle esta llena de vida hasta las 3am.
Despues del paseo por el rio, hice el check in en el hotel y tome una siesta muy reparadora. Cabe mencionar que los hoteles en donde me he quedado me han tratado bastante bien. Kudos a la agencia de viaje. Despues de la siesta, salimos a pasear por el parquesito y la Calle Western, donde tome algunas fotos. El guia ha sido de lo mas amable y ameno que me ha tocado, platicamos mucho de muchos temas. A la hora de cenar me encomende a San Sal de uvas y le pedi a Juan que me recomendara un lugar donde le gustara la comida. Si, como dice Eva, la comida en China es una Loteria, con esa comida me saque el premio mayor.
Comi pescado a la cerveza, que es la especialidad local. Sin exagerar uno de los mejores pescados que he probado en mi miserable e insipida vida. Estoy seguro que si Dios existe, sabe cocinar ese pescado. Como guarnicion pedimos unos bambues rellenos de arroz con carne Boenisimos. Tenian como un toque a tamal oaxaqueño. Deliciosos.
Despues de comer, teniamos tiempo que matar asi que caminamos por el pueblito hacia el teatro donde seria el show que estaba programado para esa noche. La caminada estuvo de lo mas agradable a lo largo del rio con un clima calido riquisimo. Luego vino el Show. Resulta que el Chino que dirigio la inaguracion de los juegos olimpicos en Beijing, vivio durante 3 años en Yangshuo, y quedo tan encantado que decidio diseñar un show para el pueblo.
El show es al aire libre frente a un pedacito de rio, empieza totalmente oscuro y uno no ve nada. De repente se encienden las montañas! Espectacular!. Participan segun mis calculos, al menos 300 personas. Con unas coreografias e ilumincaciones inmaculadas. Ademas las luces varian desde antorchas hasta trajes tipo Tron. El merito tecnico y creativo que tiene el show es enorme. Es como ver la inaguaracion olimpica en chiquito. Y lo hacen diario, dos veces, frente a 4mil personas. Sali pensando, como puede alguien visualizar algo asi? me supera.
Al otro dia, por la mañana la idea era pasear en bicicleta por el pueblo. Elegantemente convenci al guia que en bicicleta no iba a llegar yo muy lejos, asi que le cambiamos a motoneta. Tomamos un camino rural increible, entre rios, llanos y montañas. Como bien lo decia Ellie Arroway en «Contact» me hubiera gustado ser poeta, no para comonerlas en el aire, sino para poder describir con un poquito de justicia lo espectacular de los paisajes. Me senti en documental. A medio dia nos regresamos de Yangsuo a Guilin, pero esta vez por carretera en lugar de rio. Al llegar me llevaron al sitio turistico propio de la ciudad que es la montaña trompa de elefante. La montaña, efectivamente parece una trompa de elefante y le construyeron un parquesito alrededor bastante mono.
La comida ese dia fue bastante casual, pero no por eso menos buena. Otra cosa que cabe destacar de Guilin es que aca tambien se celebra la «piernavera» . Con gusto y orgullo uno puede ver como las chicas se pasean con chorcitos celebrando el clima tropical. La ultima escala en Guilin, fue la cueva de la flauta (Reed Flute Cave). Resulta que dentro de una de las montañas que rodean la ciudad encontraron una boveda enorme llena de estalactitas y estalagmitas, y hace como 20 años decidieron acondicionarla para visita al publico. El sitio es una maravilla natural, al menos para mi y cualquiera que no sea espeleologo. Algo que me parecio curioso es como el sitio estaba alumbrado con luces de colores tipo pastel de sanborns, y a cada estalactita o formacion rocosa le buscaban forma y la anunciaban. El tigre, el oso polar, el cienpies que se espanta al ver un espejo magico, y demas jaladas.
Ademas en la boveda mas grande hay cada 10 minutos un espectaculo de luces, sonido y burbujas. La verdad es que creo que tanto show es innecesario y hasta de mal gusto. La cueva es impresionante y abrumadora por si sola y en mi opinion no es necesario ponerle lucesitas para impresionar al turista.
Otro aspecto que destacar es todo el trabajo que ha de haber implicado hacer la cueva accesible al turista comun. Geologos, ingenieros y quiensabecuantos trabajadores han de haber sudado la gota gorda para construir el centro turistico de la cueva. Me quito el sombrero desde aqui.
Ahi terminó mi visita Guilin/Yangshuo.
Compadre Mau, Me parece genial todo lo que nos estas describiendo, ya me urge ver las fotografias.
Ja, ja, me estoy riendo sola, pensando en el ingenio mexicano, si se pusieran a buscar formas en las «Grutas de García» que hay en mi pueblo, no me imagino el tigre, el oso polar o demas jaladas.. simplemente como buenos mexicanos, puras jaladas, ja, ja.
Saludos 😀
A mi también se me hizo como descripción de Cacahuamilpa.
La botella.
El diablito.
¡Lotería!
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