Uno de esos días, el jueves para ser exacto, llegué al trabajo, saludé, prendí mi máquina, abrí mi correo, leí unos feeds y mientras estaba en mi ritual mañanero pre-café, llegó Maru a presentarme a las supervisoras del Call Center que estaban haciendo un Tour en el edificio.
Como buen caballero me levanté a saludarlas y les ofrecí sentarse. Al sentarme de nuevo vi de reojo que a todo lo ancho de de mi silla había un chicle pegado y embarrado. «Mmh» pensé, «¿Dónde estará la otra parte del chicle?».
Mientras Maru y las supervisoras me platicaban de cualquier cosa yo no podía dejar de pensar en toda la menta untada en mi trasero. ¡Cheil!
Posteriormente fui al baño a verificar la magnitud del daño. El asunto estaba feo.
Karma -1, Mau -0.
La improvisada técnica empleada para remover el chicle del pantalón resultó de lo mas efectiva:
Paso uno: Saque todas las cosas de los bolsillos de su pantalón y déjelas en su cajón.
Paso dos: Diríjase al baño procurando no darle la espalda a nadie.
Paso tres: Una vez en el baño quítese los pantalones, cierre los ojos, apriete los puños y desee fervientemente que nadie mas entre y lo vea en chones.
Paso cuatro: Encienda el secador de manos y ponga el pantalón bajo la corriente aire caliente.
Paso cinco: Remueva el chicle del pantalón mientras está caliente.
Repita los pasos cuatro y cinco de ser necesario.
Una vez resuelto mi problema del chicle oficineé el resto de la mañana.
Ese mismo día a la hora de comer comprobé que el dicho «Del plato a la boca, se cae la sopa» es muy cierto y que le falta añadir «…y aguas con la corbata que se puede manchar». Afortunadamente tengo una corbata de emergencias en un cajón y pude parar el gol.
Karma – 2, Mau – 1 (¡Yeah!)
Los jueves es día de juego con mis cuates, y siendo el que no vive con esposa y razonablemente céntrico se organiza en mi casa, por lo que me escabullí temprano para poder recibir a mis amigos.
Saliendo del elevador con el segundero marcando la hora en punto, me encuentro de frente c o con mi jefa y su mirada de «¿A poco ya te vas?». ¡Fuck!
Karma- 3, Mau -1.
Abordé un taxi con el plan de llegar antes que mis invitados y recoger un poco. Siendo temprano no encontramos tráfico y en cosa de 15 min ya estabamos cruzando el viaducto.
¡Ja! Karma – 3, Mau -2.
Entonces una serie rápida de imágenes del mismo día empiezan a correr en mi cabeza y me doy cuenta de algo. Me llevo las manos a los bolsillos … y nada, me reviso el saco… nada.
Cambio a: Interior – Oficina de Mau – Cajón – Llaves de la casa. (Veáse Paso 1 de cómo quitar chicle de pantalón)
Punto, Set, Match. Karma – 4. Mau – 2.
Epílogo: Una hora y 100 pesos de Taxi después, llegué a mi casa. Perdí los 2 juegos, pero eso terminó siendo anecdótico.
wow!!!
todo un día eeeh?
podría haber sido el guión de una película de acción XDD
QUE PENDEEEEEEEJO, CON TODO RESPETO.
JAJAJAJAJAJAJA
Los comentarios están cerrados.