octubre 2016

Mostaza

No cerré el frasco de la mostaza con suficiente fuerza. Y mientras lo sostenía de la tapa para guardarlo la gravedad hizo lo suyo. Mientras el frasco caía, encontró varios lugares donde rebotar, burlando leyes de la física en el proceso y esquivando mis torpes manos que trataron de interceptarlo. Mi cocina ahora parece escena del crimen de algun ser con sangre amarilla.