Fin de un peatón

Empezó la época de lluvia y un pinche buen día, que estaba yo en medio de la calle, debajo de un aguacero, después de un mal día en la oficina y sin poder conseguir transporte a mi casa dije: «ya no mas».

Me voy a comprar un auto

Mas me tardé en decidirlo y tuitearlo que en lo que dos amigos mío ya me habían ofrecido sus coches en venta.

El primero tenía muchos grados de dificultad. Un mini cooper, (Coche de Barbie le dicen) que por mas que me hizo ojitos aún es mucha lana como para que yo desembolse de un madrazo. Además su dueño, mi cuate, en un lapsus de honestidad me declaró que lo vendía por que los servicios y refacciones le salían como lumbre de caros. Opción descartada.

El otro fue mucho mas amable, un par de sms y de llamadas y ya habíamos acordado cita.
Nos vimos, nos conocimos y nos enamoramos.

Ahora ya me tengo que levantar mas temprano, preocuparme de sus verificaciones, seguro, tenencias, gasolina y servicios, y mis emisiones de CO2 aumentaron.

Dejo la vida de peatón.

4 comentarios en «Fin de un peatón»

  1. eso me pasa por ser honesto!!! jajajaja
    el de Barbie es rosa, el mio es blanco y negro… muy coqueto y chic magnet….
    Felicidades !!!

Los comentarios están cerrados.