Reflexiones Domingueras

Me gustan los domingos en la mañana.
Es el momento mas tranquilo de la semana y eso es altamente disfrutable.
Fui a dejar a mi hermano al aeroplátano. Se consiguió un trabajo nuevo y lo mandan de viaje esta semana.

Con un pan y un café en el aeropuerto me platicaba que recién llegó a su nuevo puesto se encontró con una montaña de broncas y responsabilidades. Nada nuevo.

Tengo poco mas de un año desde que me ascendieron en el trabajo y poco queda del glamour de ser el jefe que cualquier incauto en la base del organigrama se imagina.

La oficina grande es cierta, pero no hay asistente con minifalda que vaya a tomar dictado (¿Dictado de qué?), no hay entradas tarde ni salidas temprano, la paga es buena pero a veces pongo en duda que el stress lo valga.

Todo mundo piensa que el jefe le va a resolver los problemas, a veces me siento como Don Corleone el día de la boda de su hija, con fila para pedir cosas: Días de vacaciones, mas recursos, excepciones comerciales.
Un día hasta se quejaron conmigo por que una vieja habla muy fuerte. «¡Pues párate y dile que le baje a sus desmadre!». bueh…

Hubo recorte personal. Me toco donar a una chica. Sufrí. No es fácil decirle adios a alguien sin pretexto alguno. Ella era de las que llegaba temprano, hacia bien su trabajo y nunca tuve una queja de ella. ¿Cómo le dices?.
Cuando platiqué con ella lo tomo bastante bien. Parecía que era ella quien me trataba de tranquilizar «No te preocupes mi Mau, gracias por todo» me decía. ¡Cheil!

A veces pienso que no debería de quejarme tanto, sino que mas bien debería poner en perspectiva las cosas y mandar todo al carajo… pero es mucho trabajo.
No tengo tiempo de cambiar mi vida, diría el profeta del nopal.

Dejando el lloriqueo a un lado, el clima primaveral está a todo lo que da y eso me pone de buenas.
Creo que voy a aprovechar la investidura y decretar esta semana como la «semana de las minifaldas», ya luego se me ocurrirá que dictar.

Tengo que ir al mar pronto…

2 comentarios en «Reflexiones Domingueras»

  1. Mau Corleone… wow, que chida imagen, jejejeje. Lo bueno de no ser jefe es que no tengo que lidiar con el asunto del downsizing en las organizaciones. Lo malo es que está uno más expuesto a ser downsizeado…

    Apoyo tu moción de la semana de las minifaldas!

Los comentarios están cerrados.